Este domingo 3 de septiembre nos vamos a ver las clásicas de Zamora, además de un homenaje a Angel Nieto y mención a Antonio Francia de Motos Dakar que con sus 70 tacos corría con su ruidosa Norton. José Luis y Sole ya habían estado el sábado y nos han pasado unas bonitas fotos.
Salimos puntuales a las 10:30 desde el hotel Helmántico y por la autovía, con Aure y Jesús Pan en cabeza, nos plantamos en Zamora antes de las 11:30, y como no podía ser de otra manera en las rutas meseperas, nos perdimos un poco en la llegada, pero llegamos, aparcamos y nos fuimos a ver los boxes.
Por allí encontramos a Antonio de Motos Dakar, quien se ofreció amablemente a hacerse unas fotos con nosotros, además de agradecernos la visita charra. Fotos por allí, por acá, a esta moto, a la otra, a un abuelo con su nieto montado en una moto. Nos refrescamos con unas 0,0 a la sombra y cada uno donde pudo vimos el homenaje al maestro de nuestra pasión Angel Nieto y las carreras de exhibición de las de dos tiempos y de las de cuatro.
Llegadas las 14 horas, cansados, con ganas de comer y de mear, nos vamos al restaurante Don Sancho donde Ana y Rufi (moteros y navegantes zamoranos) nos habían reservado una mesa, y qué casualidad, coincidimos con la gente de Ruedas Charras compartiendo el momento y unos brindis por los moteros de Salamanca. ¡Ole! Después del café, la tertulia y pagada la cuenta, sobre las cinco volvemos a casa por el mismo camino.
Ha sido un buen día en el que hemos recorrido unos 160 km y participado 15 apasionados de las motos: Aure, Roberto, Jesús Pan, Julio, Susana, Jorge, Sergio, Rufi, Ana, Luis Kin, Adell, Mar, Sebas, Rosa Suzuki y Luis Con, toda una cuadrilla motera.
Fotos: Aure, Julio, Roberto, Luis Kin, José Luis Sole
Buen día de motos y amiguetes en Zamora…
Una pequeña representación de M.S.P., futuros miembros incluidos, hemos pasado un día genial en la cercana cuidad señorial de Zamora.
Pilotos con más canas y con más ganas de vivir que muchos de 20 nos han dado una lección de conducción y de cómo mantener motos del pleistoceno en perfectas condiciones de funcionamiento.
Luego que estos ases de las dos ruedas nos han deleitado con sus habilidades, hemos ido a comer al hotel Don Sancho de Zamora, en el que el colega motero-lanchero, de cuyo nombre no quiero acordarme hasta que no venga a mi casa con Tono, el otro lanchero, había reservado mesa.
La comida, menú degustación genial. Relación precio – calidad excelente. Eficacia, amabilidad, discreción y saber hacer, caracterizaron el trabajo de 4 mujeres Ana , Ana María, Ana Belén y Sarita que además de su buen hacer profesional tiene un componente de belleza difícil de alcanzar, y un hombre, que no me dijo su nombre, pero que también representa la calidad de un profesional en el salón. Pedí permiso a la Maître Ana, para hacerles unas fotos y ponerlas aquí, pero la puñetera Canon me ha jugado una mala pasada y eso hace que tengáis que privar de ver semejantes bellezas y eficaces camareras. Prometo que la próxima vez que pase por Zamora iré a comer a vuestro restaurante y haceros unas fotos con todas las garantías. –
Gracias amigas y amigo. Luis Díaz
Más información: www.amz-zamora.com
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